Último de los partidos disputados el pasado fin de semana en el María de Villota, a las chicas del San Ignacio les esperaba el club de Villalba, equipo muy cohesionado en el que todas sus jugadoras son de segundo año y que además juegan muy bien al baloncesto.
Nuestras chicas a pesar de no tener muchas expectativas sobre la victoria, salieron a la cancha igual de guerreras que siempre. Tardaron un poco en coger el ritmo, los primeros minutos fueron un poco titubeantes pero tras el tiempo muerto del segundo cuarto salió la garra a la que nos tienen acostumbrados, pelearon cada balón y pusieron en práctica sin temor lo entrenado durante la semana.
La evolución de nuestro equipo ha sido muy grande desde septiembre así que aunque esta vez no haya sido posible ganar sentimos esta jornada como una victoria.