Mala jornada para nuestros chicos que comenzaron descentrados y se dejaron llevar por el juego del equipo rival.
Aunque el inicio del partido tuvo más ritmo que el partido anterior San Ignacio forzó demasiados tiros, no leyó bien las ventajas, ni el balance, ni el rebote así que nuestro rival lo tuvo fácil para anotar fácilmente.
Tras el descanso jugamos mejor corrigiendo alguno de los aspectos anteriores pero no tuvimos acierto de cara al aro. A pesar de esta situación no se dieron por vencidos, si hay algo que destacar de este equipo es que no se rinden. Esa es la actitud que nos define, seguiremos trabajando. ¡Vamos San Ignacio!