Partido de nuestros juveniles en casa contra Villalba. Un partido que comienza con grandes impresiones, unos contrincantes que imponen, pero que con concentración y haciendo equipo podríamos vencer.
El partido comienza en nuestra contra, los jugadores nerviosos y la impotencia de no salir las cosas como sabemos se notaba en fallos básicos. Sin embargo conseguimos llevarnos el primer set por los pelos.
El segundo set comienza con fuerzas y ganas de vencer, en los descansos la entrenadora transmite la necesidad de crecer, motivar y jugar bien (que es como se disfruta del voleibol). Bajadas y subidas constantes, y el juego de los chicos no puede con los rivales, básicamente por fallos de concentración y frustración.
El tercer set tenía que ser de los nuestros, las ganas y fuerzas se gritan desde el banquillo, todos siendo uno. El partido termina como debía terminar, 2-1 para San Ignacio.
Tras este partido retomaremos en los entrenamientos los pequeños fallos, las incoherencias, faltas del árbitro, etc.
La entrenadora está orgullosa del equipo por su persistencia y por vencer un partido que no ha sido nada fácil. Toca seguir trabajado ¡Seguimos!