El pasado sábado, el equipo Infantil C de ADS San Ignacio protagonizó dos emocionantes encuentros de voleibol, dejando todo en el campo y demostrando una actitud ejemplar a lo largo de ambas competiciones.
Primer encuentro: San Ignacio de Loyola vs. IES Valmayor
El primer partido fue contra el equipo de IES Valmayor, un duelo lleno de energía y esfuerzo. Desde el inicio, el juego se mantuvo muy igualado, con ambos equipos luchando punto a punto por la victoria.
En el primer set, el equipo del San Ignacio mostró destellos de superioridad, logrando ventajas momentáneas en el marcador. Sin embargo, el IES Valmayor consiguió remontar en los momentos clave y se llevó el set.
El segundo set comenzó con gran actitud por parte de nuestras jugadoras, quienes corrieron a por cada balón y mantuvieron una concentración admirable en cada jugada. A pesar del esfuerzo, el rival logró imponerse nuevamente. Aunque el marcador no favoreció a las nuestras, el equipo demostró una gran resistencia, constancia y, sobre todo, una actitud ejemplar en el campo.
Segundo encuentro: San Ignacio de Loyola vs. San Lorenzo del Escorial
Tras el primer partido, las jugadoras llegaron al segundo enfrentamiento con el ánimo elevado, motivadas por su buen rendimiento previo. El rival, San Lorenzo del Escorial, planteó un desafío complicado, pero el equipo del San Ignacio mostró un juego sólido basado en una comunicación efectiva y una actitud positiva.
El primer set estuvo reñido desde el principio, con ambos equipos disputando cada punto con intensidad. Aunque San Lorenzo logró tomar la delantera en los últimos instantes, nuestras jugadoras demostraron una constancia admirable y no dejaron de luchar.
El segundo y último set comenzó con algo más de nerviosismo. Las jugadoras sintieron la presión, pero aun así lo dieron todo en el campo, siguiendo cada jugada con determinación. A pesar de la derrota, fue evidente la evolución del equipo y su capacidad de lucha en cada momento del partido.
Un día para recordar
A pesar de no lograr la victoria en ninguno de los encuentros, las jugadoras del Infantil C se fue a casa con la cabeza en alto, orgullosas de su desempeño. Mostraron una actitud incansable, lucharon punto a punto y dejaron claro que su esfuerzo y constancia son las bases para seguir mejorando.
Este tipo de experiencias refuerzan el crecimiento deportivo y personal del equipo, dejando en evidencia que el verdadero triunfo no siempre está en el marcador, sino en la pasión, el esfuerzo y la actitud dentro del campo. ¡Felicidades, equipo, por demostrar lo que significa no rendirse nunca!
